Dieta de la alcachofa: unas 47 kcal (100g), alto contenido en fibra, vitaminas, minerales (potasio), y bajo contenido en sodio. Estos nutrientes y sustancias nos proporcionan propiedades diuréticas (eliminación de agua y toxinas), la fibra da saciedad y favorece el tránsito intestinal, la cinarina mejora la digestión de las grasas, mejora función renal y hepática y la inulina facilita la absorción de la glucosa en sangre.
Pero ningún alimento adelgaza, depende de su composición, cantidad, elaboración y relación con los demás. Por tanto, lo determinante es la dieta total. Hay que encontrar el equilibrio entre la ingesta y el gasto energético.
El Ministerio de Sanidad informa que esta dieta con sus múltiples variantes (en las que en muchos casos no se ven las alcahofas, solo comprimidos que dicen llevar sus propiedades) es una de las principales "dietas milagro": engañosas porque su objetivo es obtener beneficios con la venta de un producto; que, además, puede tener potenciales riesgos para la salud*.
DIETAS MILAGRO
Dieta disociada: William H Hay, vivió
74 años (1866 - 1940) fue un médico de
Nueva York, defendió la teoría de que los hidratos de carbono no debían ser consumidos junto con las proteínas. Hoy día sabemos que no existen alimentos que solo tengan proteínas o hidratos de carbono.
Dieta del grupo sanguíneo: creada por un naturópata James L. D'Adamo de
Nueva York
(1932- 2013) murió a los
81 años, requiere una alimentación para cada tipo de sangre (A, B, AB y O). Finalmente, llegó a la conclusión de que era necesario un estudio sanguíneo personal.
Test de Alcat: consiste en la extracción de una muestra de sangre para detectar intolerancia o sensibilidad a un grupo de alimentos. Estos análisis poco rigurosos cuestan unos 600 euros.
Dieta de la Clínica Mayo: (aunque no tiene nada que ver con la famosa clínica) los huevos son el alimento principal, pudiendo comerse entre 4 y 6 diarios. Además de pescados, aves, carnes, verduras, frutas, frutos secos y productos integrales cocinados sin grasas. El té y el café son las únicas bebidas autorizadas, y
quedan excluidos los lácteos, lo que reduce la ingestión de calcio.
Dieta de Montignac: este
ejecutivo francés, graduado en Ciencias Políticas falleció de cáncer de próstata a los
65 años en 2010. Sufrió de obesidad y patentó su método que clasifica los alimentos en "buenos y malos"."Buenos", si provocan una liberación baja de glucosa en sangre y "malos", si elevan la glucosa, como los dulces y la bollería, el pan blanco, las harinas y cereales refinados, las patatas, la miel, el maíz y la maltosa (presente en la cerveza).
Dieta de Atkins: este
médico estadounidense vivió
73 años (Ohio,1930; Nueva York, 2003). Defendió el consumo casi exclusivo (90%) de proteínas y grasas y un mínimo (10%) de hidratos de carbono extraídos de las verduras y frutas, y quedan prohibidos alimentos tales como las pastas, harinas, arroz, pan y bollería, legumbres, azúcar, bebidas alcohólicas y
leche.
Dieta Dukan: médico nutricionista francés (1941). Propone un método de adelgazamiento estructurado en cuatro fases, dos para perder peso y dos para estabilizar el peso logrado.
La fase de ataque: proteínas.
La fase de crucero: alterna proteínas y verduras.
La fase de consolidación: reeducar tu cuerpo para evitar el efecto yoyó. Una reintroducción de alimentos energéticos.
La fase de estabilización: tres reglas permanentes:
•
El Jueves de PP: un día de proteínas puras a la semana
•
Paseo de 20 minutos al día y rechazo de los ascensores
•
3 cucharadas soperas de salvado de avena al día
Las "dietas milagro", generalmente conducen a situaciones que las hacen insostenibles en el tiempo y peligrosas para la salud: carencias en nutrientes esenciales (vitaminas, minerales, etc.) y alteraciones metabólicas. Por todo ello tienen una elevada tasa de abandono, hasta del 50% en el primer mes.
Efectos contraproducentes
Las "dietas milagro" ponen en marcha mecanismos en el organismo que impiden la pérdida de peso: ahorro energético e incremento del apetito. Todo ello favorece la recuperación rápida del peso perdido (efecto rebote) cuando se abandona el régimen, provocando el fenómeno "yo-yo".
Además, ante esta situación de semiayuno, el organismo reacciona compensando la falta de energía con un aumento de la destrucción de las proteínas corporales, como fuente alternativa, lo que provoca la disminución de masa muscular y la formación de cuerpos cetónicos, tóxicos para el organismo; estos pueden aumentar la concentración de ácido úrico y alterar los riñones. Un exceso de eliminación de líquidos favorece la pérdida de minerales y otros nutrientes.
Recomendaciones para perder peso correctamente y evitar efecto rebote:
La dieta debe aportar las calorías necesarias para cubrir las necesidades metabólicas.
En general, se recomienda unas 40 kcal por kilo de peso y día. No realizar dietas con menos de 1500 kcal para la mujer y 1700, el hombre, sin prescripción médica. Un objetivo razonable es la pérdida del 10 % del peso en 6 meses con dieta equilibrada.
Dieta buena = EFNS
- Dieta equilibrada
- Fácil de seguir (se adapta a los hábitos y gustos del paciente)
- No sacrificada (que se pase poca o ninguna hambre)
Dieta equilibrada
Necesitamos unos 50 componentes que están en los principios inmediatos: hidratos de carbono, proteínas, lípidos, vitaminas y minerales. Estos se encuentran irregularmente repartidos en los alimentos que se clasifican: 1. cereales y patatas; 2. Legumbres 3. Carne, pescado y huevos; 4. Frutas; 5.Verduras; 6. Lácteos y derivados; 7. Aceites y grasas.
Para que la dieta sea equilibrada y obtengamos las sustancias requeridas por el organismo tenemos 15 días para ingerir una alimentación variada y valorar la media. Necesitamos HC 50% y Lípidos 35% (combustible); Proteínas 15% (formadoras); Vitaminas, Minerales y Fibra (reguladores). Las proteínas deben ser mayormente de alto valor biológico, siendo su ingesta mínima aproximada de 1 g/kg de peso corporal; los hidratos de carbono preferentemente complejos, con una ingesta mínima de alrededor de 150 g/día, incluyendo un aporte de fibra dietética de 20- 30 g/día; no exceder el consumo de grasas recomendados, así como la sal (5 gr/día) para evitar la retención de líquidos (sobrecarga renal e hipertensión).
Sigue estos consejos:
1. Consultar al médico.
2. Realizar cinco comidas al día.
3. Planificar de antemano lo que vas a comer.
4. Establecer un horario fijo para las comidas.
5. Utilizar platos pequeños.
6. Masticar lentamente.
7. Beber entre 1.5-2 l de agua al día(no refrescos, ni alcohol).
8. Dieta mediterránea.
9. Practicar un ejercicio agradable.
10. Pérdida de peso entre medio y un kilo por semana
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http://www.naos.aesan.msc.es/csym/saber_mas/articulos/dietas.html